Las vacas son animales grandes, curiosos, sociales e inteligentes, especialmente sensibles a los sobresaltos que les estresan y causan miedo.
Con respecto a su percepción, para las vacas es más importante su vista que su oido, pueden distinguir colores y ver en profundidad (perciben mejor las líneas verticales que las horizontales) y mientras comen hierba pueden ver permanentemente el horizonte. En general son animales muy sensibles a los movimientos y contrastes de luz, por ello, y a pesar de su gran curiosidad, basta una sombra en el suelo para que no quieran acercarse a esa zona o para tener miedo.
Los terneros sufren estrés cuando son llevados a lugares que desconocen o no les son familiares (como cuando son transportadas en camiones hacia el matadero).
Las vacas tienen un buen oido y son muy sensibles a los sonidos agudos; de hecho son capaces de percibir sonidos de frecuencias altas inaudibles para nosotros (mientras que nosotros podemos percibir sonidos de frecuencias de hasta 3.000 Hz ellas son sensibles a sonidos de 8.000Hz). Al igual que sucede con las sombras o los sobresaltos, el ruido repentino les provoca estrés -mientras que la música a un volumen moderado reduce su miedo.
Además de todo esto, las vacas también pueden sentir el tacto más sútil sobre su piel, como cuando una mosca se posa sobre su cuerpo, imaginémonos lo que sienten cuando les taladran la oreja para ponerles identificadores.
Una vaca en libertad
Las vacas pueden llegar a vivir unos quince años (normalmente se las asesina al año de su nacimiento para obtener de ellas una carne más tierna). En libertad la mayoría disfruta estando tranquilas, cuidando y queriendo a los suyos, pastando en sus lugares favoritos y tomando el sol. Su vida puede parecernos aburrida a nosotros pero ellas disfrutan enormemente con estas
actividades.
Saber como son estos animales puede hacernos una idea de lo que padecen cuando son explotadas para beneficio humano. Cuando algunas de sus compañeeras, familiares o hijos son llevadas al matadero, cuando se las recluye o maltrata, estos seres con intensas vidas emocionales e intelectuales sufren tanto como padeceríamos uno de nosotros al ser utilizados en contra de nuestra voluntad.
Las vacas son explotadas por su carne, por su leche y por su piel. El objetivo de su explotación dependerá de su raza. En cuanto a los terneros, son asesinados por su carne independientemente de la raza a la que pertenezcan, salvo aquellas terneras de razas "lecheras" que se destinen a
producir leche y parir terneros. Las vacas, toros y terneros de cualquier raza, son en su conjunto denominadas "ganado bovino".
Por su carne:
la parte principal de la carne obtenida de la explotación de estos animales proviene de las terneras de diferentes edades (lechal, baby-beef, novillo,...). Las vacas adultas son principalmente explotadas como reproductoras, siendo enviadas al matadero cuando el ganadero lo considere oportuno (descenso de capacidad reproductiva, enfermedad, motivos económicos).
En cuanto a los toros, los únicos que llegan a adultos son los destinados a sementales pues al no poder parir, este es el único interés econmico que el ganadero puede tener en un toro adulto.
Bebés al fin y al cabo, de pocos meses de vida, que solo desean encontrar a sus madres y descubrir y disfrutar el mundo al que tan recientemente acaban de llegar, son asesinados solo porque nos gusta el sabor de su carne. Hay dos denominaciones de terneras según su edad de asesinato:
a) Ternera lechal: la carne de ternera lechal se obtiene de aquellos terneros criados con la propia leche natural de su madre o de una nodriza, sin complemento alguno de concentrados o forrajes, y mantenidos en establos semioscuros y reducidos. Para lograr el color deseado, la dieta del ternero debe ser pobre en hierro y su movilidad debe ser reducida. En el caso de que reciban una alimentación a base de leches artificiales, estas deberían ir desprovistas de hierro, procurando que los terneros tampoco tengan ocasión de lamer paredes, hierros y comer pajas o henosas. Los terneros lechales son enviados a morir cuando solo tienen cuatro meses de edad.
b) Baby-beef : se denominan así a las terneras macho que se envían al matadero a los 11 meses de vida. Reciben un plan intensivo de alimentación destinado a obtener la mayor cantidad de carne posible aprovechando el potencial de crecimiento y el desarrollo muscular.
Las principales modalidades de explotación de terneros son:
Explotación extensiva
El ternero vive con su madre y mama cuando quiere. A pesar de tener una cierta capacidad de movimiento, llegará el momento en que madre e hijo sean separados, en una traumática experiencia para ambos, siendo el hijo metido en un camión y enviado a un matadero donde le colgarán boca abajo y le cortarán la garganta. Esta explotación eleva enormemente los costes de
producción y por tanto el precio final, por lo que es minoritaria.
Explotación mixta
De este modo se explotan la mayor parte de las terneras de razas "cárnicas". Los terneros pueden pasar unas semanas con sus madres en "libertad" y después se les aísla para ser cebados. En esta modalidad se explota a los denominados baby-beef. Aunque conocen una vida de condiciones aceptables durante un tiempo, sufrirán el resto de su vida las mismas calamidades que padecerían en explotación intensiva.
Explotación intensiva
Las terneras en explotación intensiva son las hijas e hijos de las vacas explotadas por la industria lechera. Se las separa de su madre entre 3 y 8 días después de su nacimiento. Después son vendidas a criadores profesionales. Son aisladas en diminutos cajones donde se les inmoviliza y
donde recibirán una alimentación artificial pobre en hierro formada por, leche en polvo, vitaminas, minerales, azucar, antibióticos y fármacos para el crecimiento. Estas medidas van encaminadas a conseguir una carne blanca y blanda, (gracias a la anemia y al atrofiamiento muscular por falta de movimiento), y a una búsqueda de optimización de los costes de alimentación del ternero (pues al no moverse no quema calorías y engorda más deprisa).
En esta situación, que durará varios meses (según considere oportuno el ganadero para su beneficio económico), el ternero padece graves problemas psíquicos y físicos.
Por su leche:
Las empresas que explotan vacas por su leche obtienen su beneficio económico robándoles a sus hijos y toda o la mayor parte de la leche que producen para ellos. Una pequeña minoría de la leche que llega al mercado proviene de vacas en explotación extensiva. A pesar de que las vacas están en prados u otros espacios al aire libre, sufren el trauma de la separación de sus hijos los cuales son enviados al matadero o a un criadero de terneras. Esto ocurre siempre, salvo si se quiere destinar a la hija de una vaca a ser explotada por su leche en un futuro o al hijo a semental. Y si ocurre, es debido a que las granjas son empresas y el motivo de su existencia es el beneficio económico y no los intereses de los animales.
Por otro lado, a estas vacas les ocurre lo mismo que a cualquier animal explotado de forma extensiva o ecológica: cuando la rentabilidad de su explotación baje, ya sea por enfermedad o por edad, serán metidas en un camión y enviadas al matadero.
La mayoría de la leche consumida es de origen intensivo. Las vacas viven casi permanentemente en cubículos individuales con suelo de cemento que les provoca dolor al no estar anatómicamente preparadas para ello. Son inseminadas una vez al año durante cuatro años, fecha tras la cual su producción de leche desciende y son enviadas al matadero. Mediante la manipulación genética, la selección y las mejoras en las técnicas de
explotación, las vacas pueden llegar a producir hasta 45 litros de leche al día, 10 veces más que su capacidad normal.
Así, la vida de la mayoría de las vacas destinadas a la explotación lechera consiste en un infierno de 6 años en el que las separan de sus bebés en unas cuatro ocasiones, en el que les roban miles de litros de leche, sufren dolor en las ubres y en las articulaciones, son aisladas, se las impide relacionarse con otros miembros de su especie y finalmente son introducidas en un camión y asesinadas en un matadero.
El viaje más largo...
Arrancadas de las granjas donde sobreviven a varios años de esclavitud, las vacas explotadas por su leche o carne tiene que soportar antes de llegar al matadero un viaje donde el dolor, el stress y la angustia de un trayecto que puede durar días lo convierten en insoportable. Demasiadas veces estos trayectos se realizan sin agua ni comida, falleciendo muchas de ellas a consecuencia del viaje.
Los camiones han cambiado poco a lo largo de los años, con los mataderos y las granjas lejos unos de otros (a veces los animales son trasladados a otras ciudades e incluso otros países) los animales padecen no solo daños psicológicos sino también daños físicos provocados por los suelos del camión o el trato de los operarios.
Pocos después de haber nacido, los terneros macho hijos de las vacas lecheras son alejados de sus madres y arrastrados por las orejas, a golpes o empujados a la espera de ser vendidos o llevados a cajones de madera donde permancerán sin apenas moverse hasta el día de su muerte, aproximadamente a las 16 semanas de edad.
Ellas parpadean. Hacen ruidos... mueven la cabeza, los ojos están abiertos y mirando alrededor. Ellas mueren 'pieza a pieza'.
Las vacas son dirigidas en los mataderos hacia la zona de aturdimiento, puede ser en cajones o en railes que las sujetan por debajo. El objetivo es privarles de libertad y facilitar el que el matarife pueda acercarse a ella y dispararle una bala cautiva con una pistola. Cuando están en los cajones,
las vacas tratarán de salir saltando, suelen moverse agitadamente lo que dificulta que el disparo sea certero.
Vaca en la zona de aturdimiento
Una vez disparadas en la cabeza con una pistola de proyectil cautivo que no siempre las deja inconscientes, las vacas son colgadas boca abajo y se las corta el cuello y las extremedidades. No es raro que las vacas sigan conscientes cuando son colagadas boca abajo. Teniendo en cuenta que su peso que puede ser de alrededor de 500 Kg., al colgarlas sus músculos y ligamentos se desgarran, cuando están conscientes esto les provoca grandes sufrimientos añadidos al pánico de encontrarse boca abajo en un entorno extraño y en movimiento. Muchas veces los animales todavía están plenamente conscientes hasta siete minutos después de que se les haya cortado el cuello y muchos matarifes relatan encontrarse con vacas plenamente conscientes en su trabajo diario.
Vaca inmobilizada
Un aturdimiento efectivo requiere un disparo certero, los trabajadores deben ser certeros cientos de veces al día con animales asustados y grandes que generalmente pesan más de 500 kilos. Antes de 12 segundos de entrar en la sala, la vaca caída es enganchada a una cadena en movimiento para ser desangrada y descuartizada por otros trabajadores en una cadena de
producción rápida.
La fuente: http://www.granjasdeesclavos.com/vacas/como-son
(dentro de esa página hay mas fuentes de todo este contenido).
producir leche y parir terneros. Las vacas, toros y terneros de cualquier raza, son en su conjunto denominadas "ganado bovino".
Por su carne:
la parte principal de la carne obtenida de la explotación de estos animales proviene de las terneras de diferentes edades (lechal, baby-beef, novillo,...). Las vacas adultas son principalmente explotadas como reproductoras, siendo enviadas al matadero cuando el ganadero lo considere oportuno (descenso de capacidad reproductiva, enfermedad, motivos económicos).
En cuanto a los toros, los únicos que llegan a adultos son los destinados a sementales pues al no poder parir, este es el único interés econmico que el ganadero puede tener en un toro adulto.
Bebés al fin y al cabo, de pocos meses de vida, que solo desean encontrar a sus madres y descubrir y disfrutar el mundo al que tan recientemente acaban de llegar, son asesinados solo porque nos gusta el sabor de su carne. Hay dos denominaciones de terneras según su edad de asesinato:
a) Ternera lechal: la carne de ternera lechal se obtiene de aquellos terneros criados con la propia leche natural de su madre o de una nodriza, sin complemento alguno de concentrados o forrajes, y mantenidos en establos semioscuros y reducidos. Para lograr el color deseado, la dieta del ternero debe ser pobre en hierro y su movilidad debe ser reducida. En el caso de que reciban una alimentación a base de leches artificiales, estas deberían ir desprovistas de hierro, procurando que los terneros tampoco tengan ocasión de lamer paredes, hierros y comer pajas o henosas. Los terneros lechales son enviados a morir cuando solo tienen cuatro meses de edad.
b) Baby-beef : se denominan así a las terneras macho que se envían al matadero a los 11 meses de vida. Reciben un plan intensivo de alimentación destinado a obtener la mayor cantidad de carne posible aprovechando el potencial de crecimiento y el desarrollo muscular.
Las principales modalidades de explotación de terneros son:
Explotación extensiva
El ternero vive con su madre y mama cuando quiere. A pesar de tener una cierta capacidad de movimiento, llegará el momento en que madre e hijo sean separados, en una traumática experiencia para ambos, siendo el hijo metido en un camión y enviado a un matadero donde le colgarán boca abajo y le cortarán la garganta. Esta explotación eleva enormemente los costes de
producción y por tanto el precio final, por lo que es minoritaria.
Explotación mixta
De este modo se explotan la mayor parte de las terneras de razas "cárnicas". Los terneros pueden pasar unas semanas con sus madres en "libertad" y después se les aísla para ser cebados. En esta modalidad se explota a los denominados baby-beef. Aunque conocen una vida de condiciones aceptables durante un tiempo, sufrirán el resto de su vida las mismas calamidades que padecerían en explotación intensiva.
Explotación intensiva
Las terneras en explotación intensiva son las hijas e hijos de las vacas explotadas por la industria lechera. Se las separa de su madre entre 3 y 8 días después de su nacimiento. Después son vendidas a criadores profesionales. Son aisladas en diminutos cajones donde se les inmoviliza y
donde recibirán una alimentación artificial pobre en hierro formada por, leche en polvo, vitaminas, minerales, azucar, antibióticos y fármacos para el crecimiento. Estas medidas van encaminadas a conseguir una carne blanca y blanda, (gracias a la anemia y al atrofiamiento muscular por falta de movimiento), y a una búsqueda de optimización de los costes de alimentación del ternero (pues al no moverse no quema calorías y engorda más deprisa).
En esta situación, que durará varios meses (según considere oportuno el ganadero para su beneficio económico), el ternero padece graves problemas psíquicos y físicos.
Por su leche:
Las empresas que explotan vacas por su leche obtienen su beneficio económico robándoles a sus hijos y toda o la mayor parte de la leche que producen para ellos. Una pequeña minoría de la leche que llega al mercado proviene de vacas en explotación extensiva. A pesar de que las vacas están en prados u otros espacios al aire libre, sufren el trauma de la separación de sus hijos los cuales son enviados al matadero o a un criadero de terneras. Esto ocurre siempre, salvo si se quiere destinar a la hija de una vaca a ser explotada por su leche en un futuro o al hijo a semental. Y si ocurre, es debido a que las granjas son empresas y el motivo de su existencia es el beneficio económico y no los intereses de los animales.
Por otro lado, a estas vacas les ocurre lo mismo que a cualquier animal explotado de forma extensiva o ecológica: cuando la rentabilidad de su explotación baje, ya sea por enfermedad o por edad, serán metidas en un camión y enviadas al matadero.
La mayoría de la leche consumida es de origen intensivo. Las vacas viven casi permanentemente en cubículos individuales con suelo de cemento que les provoca dolor al no estar anatómicamente preparadas para ello. Son inseminadas una vez al año durante cuatro años, fecha tras la cual su producción de leche desciende y son enviadas al matadero. Mediante la manipulación genética, la selección y las mejoras en las técnicas de
explotación, las vacas pueden llegar a producir hasta 45 litros de leche al día, 10 veces más que su capacidad normal.
Así, la vida de la mayoría de las vacas destinadas a la explotación lechera consiste en un infierno de 6 años en el que las separan de sus bebés en unas cuatro ocasiones, en el que les roban miles de litros de leche, sufren dolor en las ubres y en las articulaciones, son aisladas, se las impide relacionarse con otros miembros de su especie y finalmente son introducidas en un camión y asesinadas en un matadero.
El viaje más largo...
Arrancadas de las granjas donde sobreviven a varios años de esclavitud, las vacas explotadas por su leche o carne tiene que soportar antes de llegar al matadero un viaje donde el dolor, el stress y la angustia de un trayecto que puede durar días lo convierten en insoportable. Demasiadas veces estos trayectos se realizan sin agua ni comida, falleciendo muchas de ellas a consecuencia del viaje.
Los camiones han cambiado poco a lo largo de los años, con los mataderos y las granjas lejos unos de otros (a veces los animales son trasladados a otras ciudades e incluso otros países) los animales padecen no solo daños psicológicos sino también daños físicos provocados por los suelos del camión o el trato de los operarios.
Pocos después de haber nacido, los terneros macho hijos de las vacas lecheras son alejados de sus madres y arrastrados por las orejas, a golpes o empujados a la espera de ser vendidos o llevados a cajones de madera donde permancerán sin apenas moverse hasta el día de su muerte, aproximadamente a las 16 semanas de edad.
Ellas parpadean. Hacen ruidos... mueven la cabeza, los ojos están abiertos y mirando alrededor. Ellas mueren 'pieza a pieza'.
Ramón Moreno. Matarife.
Las vacas son dirigidas en los mataderos hacia la zona de aturdimiento, puede ser en cajones o en railes que las sujetan por debajo. El objetivo es privarles de libertad y facilitar el que el matarife pueda acercarse a ella y dispararle una bala cautiva con una pistola. Cuando están en los cajones,
las vacas tratarán de salir saltando, suelen moverse agitadamente lo que dificulta que el disparo sea certero.
Vaca en la zona de aturdimiento
Una vez disparadas en la cabeza con una pistola de proyectil cautivo que no siempre las deja inconscientes, las vacas son colgadas boca abajo y se las corta el cuello y las extremedidades. No es raro que las vacas sigan conscientes cuando son colagadas boca abajo. Teniendo en cuenta que su peso que puede ser de alrededor de 500 Kg., al colgarlas sus músculos y ligamentos se desgarran, cuando están conscientes esto les provoca grandes sufrimientos añadidos al pánico de encontrarse boca abajo en un entorno extraño y en movimiento. Muchas veces los animales todavía están plenamente conscientes hasta siete minutos después de que se les haya cortado el cuello y muchos matarifes relatan encontrarse con vacas plenamente conscientes en su trabajo diario.
Vaca inmobilizada
Un aturdimiento efectivo requiere un disparo certero, los trabajadores deben ser certeros cientos de veces al día con animales asustados y grandes que generalmente pesan más de 500 kilos. Antes de 12 segundos de entrar en la sala, la vaca caída es enganchada a una cadena en movimiento para ser desangrada y descuartizada por otros trabajadores en una cadena de
producción rápida.
Las vacas y terneros, una vez son aturdidos con una pistola de proyectil cautivo, son colgadas boca abajo de una cadena en movimiento que las desplazará hasta el operario que le cortará el cuello para que se desangre. Las vacas tardan varios minutos en desangrarse, durante este tiempo se suele tratar de recoger su sangre para su utilización posterior.
Tras el desangrado se procede a su evisceración o extracción de órganos internos. Posteriormente se suele enganchar su piel en un rodillo que a gran velocidad saca la piel de la vaca en apenas unos segundos. Esta piel será posteriormente destinada a su curtido para ser utilizada como cuero. Junto con su piel, también se utilizará su sangre además de sus músculos
destinados al mercado cárnico.
Su cadáver despellejado (denominado por la industria como "canal") es cortado en dos partes, marcado para su identificación y trasladado para su carga en los camiones que los servirán a las carnicerías o salas de despiece.
Tras el desangrado se procede a su evisceración o extracción de órganos internos. Posteriormente se suele enganchar su piel en un rodillo que a gran velocidad saca la piel de la vaca en apenas unos segundos. Esta piel será posteriormente destinada a su curtido para ser utilizada como cuero. Junto con su piel, también se utilizará su sangre además de sus músculos
destinados al mercado cárnico.
Su cadáver despellejado (denominado por la industria como "canal") es cortado en dos partes, marcado para su identificación y trasladado para su carga en los camiones que los servirán a las carnicerías o salas de despiece.
La fuente: http://www.granjasd
(dentro de esa página hay mas fuentes de todo este contenido).
3 comentarios:
Puuuuuf madre mía, sé que este artículo es del 2010 pero acabo de verlo y es MUY MUY MUY exagerado.. se nota un poco la falta de información.
Soy estudiante de último curso de veterinaria, y te puedo asegurar que:
1- En la granja, en la mayoría, al menos en España, allá de donde eres tú no se si el tema estará menos avanzado, a las vacas no se las maltrata ni mucho menos, hay unas leyes de bienestar animal de obligado cumplimiento, y a las vacas de leche NO se las aisla ni se las impide el contacto con otras vacas :S
2- El trayecto al matadero no suele durar días, pero ni de coña, y en el matadero como muchísimo pueden permanecer 24 horas, y ni eso, y en el viaje te puedo asegurar que "muchas" no fallecen, como dices ahí, si no, valla negocio! No fallece casi nunca ninguna, los camiones están bien adaptados a ellas.
3- Pones a los operarios como unas bestias, y yo jamás he visto un trato hostil a los animales, se usa una varilla para guiarles, y lo de que separan al ternero de la madre de las orejas y a ostia limpia vamos.....nada más lejos de la realidad,lo que se quiere es que la separación de la madre se realice con la mayor calma posible.
4- Una vez en el matadero, allí se encuentran bastante tranquilas, y lo digo porque lo he visto, en el momento antes del sacrificio, en el aturdimiento las meten en un cajón para inmovilizarlas, y el poco movimiento que realizan NO dificulta el disparo con la bala cautiva, permanecen apenas 5-10 segundos en el cajón.
5- La bala cautiva es MUY MUY eficaz, te lo puedo asegurar, he visto caer vacas a mis pies completamente K.O e inconscientes: sufren un fortísimo traumatismo craneoencefálico irreversible, luego son colgadas y desangradas.. y JAMÁS son conscientes, a lo que te puedes referir son a los espasmos musculares, que no tienen absolutamente nada que ver con que estén sufriendo.
6- No se le desgarran los tendones ni se ven boca abajo ni historias de estas, ya que como he dicho antes, están completamente traumatizadas cerebralmente.
Soy completamente objetiva, ya que me molesta mucho que se hable sin conocimiento, he hablado como veterinaria, ahora voy a hablar subjetivamente:
La experiencia más traumática de mi vida ha sido estar en un matadero de vacas, es el sitio más lúgubre que he visto jamás, para mí lo más horrible fue ver entrar en el cajón de aturdimiento a la vaca, ver cómo saca la cabeza, mirarla a los ojos y ver cómo la bala la deja K.O y se desploma, abriéndose una compuerta y cayendo con un fuerte estruendo a una zona donde se la cuelga del tendón, posteriormente se la acuchilla en el cuello y se desangra durante unos 5 minutos, pasar entre las vacas muertas ahí colgadas, tan enormes,con el suelo lleno de sangre... fue la experiencia más horrorosa que he vivido, pero sin duda la imagen que se me quedará grabada para siempre es la mirada de la vaca antes y después de la bala...
A mi también me da pena las explotaciones en intensivo, y que se sacrifiquen terneros, y vacas, y cualquier animal, pero soy objetiva, y el veganismo es totalmente utópico, ya no por la salud, que el ser humano necesita proteínas de origen animal, sino por todos los puestos de trabajo que genera el sector de la producción animal, de la mejora genética para la producción, la ganadería, las empresas lácteas, cárnicas, de huevos, los mataderos.... el comercio internacional... por eso el sector de producción animal para productos de consumo humano va a seguir, porque es necesario, y hablo para la economía de todos los países.
No pretendo que estéis de acuerdo conmigo, ni mucho menos, os puedo asegurar que amo los animales más que nadie en este mundo y sufro muchísimo cuando ellos sufren, pero soy objetiva y hay cosas que simplemente no pueden ser.
1saludo desde España :)
si conociera a tus afectos, lo cierto es que les diria que minimamente te tengan miedo. reconocer el valor inherente de cualquier ser vivo no es una opcion personal, es un acto de justicia, sean vacas, perros o mujeres, incluso como vos. negar la evolucion del pensamiento en aras de la empatia, la inclusion, y la armonia con los seres y el medio que nos rodea es de necios, cuando no idiotas. http://www.abolitionistapproach.com/media/pdf/ARAA_Pamphlet_Spanish.pdf
Con o sin maltrato, no hay justificación para matar.
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