¿Alguna vez ha tenido que esperar más de media hora para que un mesonero se acerque a tomar su orden? o ¿alguna camarera le ha torcido los ojos porque no le dejó propina?
Pues, para algunos alemanes modernos esos episodios pertenecen al pasado. En Nuremberg, se instaló un restaurante automatizado: 's Baggers.
A Alemania le gusta definirse como "la tierra de las ideas", y con el transcurso de los siglos ha demostrado que ha sido la cuna de grandes inventos. Sólo hay que recordar que los alemanes crearon la aspirina, la imprenta y el motor diesel, por citar sólo algunos ejemplos.
Ahora Alemania vuelve a ser pionera al dar a luz a un restaurante que no necesita mesoneros para atender a su clientela.
Sin intervención humana
En el establecimiento, usted mismo toma su orden. Para ello, utiliza una pantalla sensible al tacto que despliega el menú con fotografías de los platos.
Su pedido aparece en el monitor que está en la cocina, donde un chef "de carne y hueso" prepara su platillo.
Mientras espera por su comida, tiene varias opciones para distraerse: puede revisar su correo electrónico, leer sobre los ingredientes de su orden o simplemente navegar por la red.
Cuando su plato está listo, el chef le coloca a la tapa una etiqueta con su descripción y un color para que llegue al puesto del comensal.
El cocinero pone la orden en un pequeño dispositivo, parecido a un carrito, que después se desliza por un sistema de tubos que desciende desde la cocina hasta su silla, cuyo número usted especificó previamente en la pantalla táctil cuando introdujo su pedido.
Como venida del cielo, al estilo alemán, su comida desciende, desde la cocina, por una especie de montaña rusa, hecha con tubos de metal y que cruzan el restaurante como un caracol.
Costos
El local es la creación del empresario de Nuremberg Michael Mack.
"Deseaba hacer un restaurante con un sistema completamente nuevo", dijo Mack, "uno que fuese más eficiente y más cómodo".
Es más divertido para los jóvenes que para la gente mayor (...) Mi madre estuvo aquí ayer y necesitó de mi hijo para pedir la comida
Clienta de 's Baggers
Mack reemplazó los mesoneros con un tobogán y computadoras, elementos que divierten a los clientes.
Desde la perspectiva financiera, el restaurante tiene su lógica.
"Puedes ahorrar los gastos propios de tener personal", explicó la vocera del establecimiento Kyra Mueller-Siecheneder.
"No necesitas mesoneros para que tomen los pedidos, corran a la cocina y regresen a las mesas".
Sin embargo, el local no ha prescindido totalmente de los seres humanos. Algunos empleados están encargados de explicarle a los clientes cómo usar la tecnología.
Pero ¿qué piensan los clientes?
"Es otro arte para comer. A mí me gusta", confesó un comensal a la BBC.
"Es más divertido para los jóvenes que para la gente mayor", indicó una mujer. "Mi madre estuvo aquí ayer y necesitó de mi hijo para pedir la comida".
Fuente: Redacción BBC Mundo
La reflexión de F:
Lo publicamos pensando en como en la historia ha venido cambiando el tipo de trabajo de la mayoría de los seres humanos, desde la agricultura, a la manufacturera, luego a la de servicios y como vemos ahora que ésta también comienza a declinar. ¿Y luego que sigue? Una brillante idea nos aporta el Proyecto Venus del Movimiento Zeitgeist.
Algo más a la mano para implementar en nuestro país hoy en día es una reforma agraria inteligente (RAI) (tierra fértil para el pueblo que la cuide y la trabaje organizadas en pequeñas comunidades con estructura circular). ¿Al Gobierno le parece tan difícil empezar con los interesados esta RAI? ¿Acaso existen viles intereses que están impidiendo esta evolución del ser humano?
Son cuestiones que hay que lograr responder y problemas que hay que lograr superar. Hoy por hoy es inminente una RAI.
Basta de excusas Gobierno!!! Liberá de una vez por todas a la gente que quiera hacerlo de los trabajos sin sentido que le llevan toda la vida por 2 mangos.
F.
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